El alfabeto audiovisual y los micromundos

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Sonia Blanco, Profesora de la Facultad de Ciencias de la Comunicación en la Universidad de Málaga, fue la encargada de introducir las cuestiones esenciales que se tratarían en el encuentro. Comenzó citando las palabras de Umberto Eco sobre la "exasperación política" que tienden a generar los avances en los medios de comunicación, cuando en realidad "los nuevos medios conviven con los anteriores, y el vídeo nunca mató a la estrella radiofónica". Blanco destacó en su presentación los retos que los nuevos formatos suponen para nuestra forma de entender lo audiovisual, así como la nueva actitud del usuario como creador de contenidos.

"Hace menos de veinte años no teníamos más que una cadena de televisión; la eclosión de las nuevas ventanas ha sido tan rápida que el espectador no ha podido formarse un criterio". Con esta reflexión comenzaba su intervención Félix Gómez-Urda, director y productor del Festival Internacional de Jóvenes Realizadores de Granada. "Puede parecer estalinista -dijo-, pero ya que la formación audiovisual no entra en el sistema de enseñanza, tiene que haber organismos que defiendan la alfabetización audiovisual del público". Gómez-Urda puso como ejemplo la iniciativa del festival granadino, para cuya última edición invitaron a los espectadores a hacer una preselección de las obras: "Queremos dar capacidad de elección a nuestro público, de ahí la necesidad de educarlos en el mundo audiovisual, porque hoy en día hay una gran saturación de contenidos". En ese sentido, defendió el papel de los festivales, decisivo en la distribución de contenidos: "Serán una de las pocas plataformas reales para ver cierto tipo de obras".

Por su parte, el director del canal cultural web Celda TV, David Navarro, defendió la importancia de los contenidos, que "no son más que la expresión para el ser humano, el modo en que éste intenta interpretar o ficcionar su vida diaria". Según Navarro, la televisión irá pasando a ocupar el lugar central en el mundo audiovisual: "Hoy parece que la tele es una mierda, pero también es el arte de enviar y recibir imágenes". Por eso abogó por canales con contenidos de calidad, como Celda TV, que "es un micromedio en el que emitimos lo que nos gustaría ver". Entrevistas con autores y artistas de distinto ámbito es la oferta de esta cadena web, que tuvo el privilegio de acoger los "micromundos" de Jaime Rosales, antes del gran éxito de ’La soledad’ en los Goya. Navarro propone este tipo de alianzas "donde el mundo de los medios generalistas desaparece, porque el público tiene necesidades muy diferenciadas".

Asimismo, el director de Celda TV dio algunas pistas sobre cómo pueden evolucionar los medios en Internet. Por un lado, apostó por desprenderse de los formatos audiovisuales clásicos -entrevista, narración- y reinventar el idioma, porque "ese encorsetamiento de las televisiones no puede continuar". También habló de la Red como "el lugar de la profundización, y no sólo del entretenimiento", gracias a su capacidad para contextualizar la información. "Se dice que en Internet todo tiene que ir volando, pero en realidad los contenidos se pueden pausar, guardar o ver en otro momento, al contrario de lo que ocurre con la televisión", comentó. Por ello, en opinión de Navarro las estructuras de emisión deberían amoldarse al espectador, y los canales tendrían que "mantener almacenados los contenidos porque, de lo contrario, las ideas desaparecerán". Por último, acabó su ponencia afirmando que "los medios tradicionales están fracasando, aunque haya mucha inversión en ellos".

Eli Lloveras, que dirige y coordina la web de distribución de vídeo y art media Hamaca, habló de las dificultades con que se toparon al comenzar su proyecto, hace ya un año. En este sentido, destacó la "desestructuración y precariedad del sector, en un campo ya de por sí complejo e híbrido". Sin embargo, la apuesta de Hamaca desde entonces ha sido la de "crear un modelo personalizado para cada artista", que incluye contratos de distribución no exclusivos y un gran abanico de posibilidades en cuanto a la gestión de derechos sobre la obra audiovisual. Para Lloveras, "es el artista quien debe decidir, por eso lo importante es crear un mercado que pueda revertir en ellos".

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